Una bañera es un lugar en el que no tendrías una reunión de trabajo ni una primera cita.
La percepción de la bañera cambia con los años.
Cuando tenías tres años era un lugar para el disfrute, ya podía ser un gran barreño o una piscina diaria de fondo blanco en el que crear barbas de jabón. Ahora es algo en lo que piensas pero no haces.
La ducha le ha quitado protagonismo a la bañera: a nadie le suena el despertador, salta de la cama y se prepara una bañera antes de ir a trabajar, pero en el lado opuesto del día, llegas a casa con la fuerza justa para hacerte la cena y recoger la cocina; como para empezar con el ritual sobrevalorado de la bañera.
Hoy dedicamos nuestro Meteorito a bañeras, a las que tienen patas, a las que no, a las que sacan burbujas, a las que te dejan como una pasa, a las que llenas con cubitos de hielo y bebidas para una fiesta, a las que les sale una garra y ya no te quieres volver a bañar en la vida, a las que utilizas como pecera, a las que ya no quieres y cambias por plato de ducha y en general, a las no relajantes.
Disfruta de nuestras bañeras,
Gemma L.
Lyona – @lyona_ivanova
Mercrominah – @mercrominah
Javirroyo x Back Market – @javirroyo
⚡️ Esta newsletter de bromas dibujadas que recibes es posible gracias al apoyo de las amigas de @backmarket_es quienes tienen por objetivo prolongar la vida de la tecnología, para reducir su brutal impacto en el planeta. ⚡
Descubre más sobre el lado oscuro de la tecnología pinchando aquí .
La Mandanga x Back Market – @la_mandanga
